En comunicación con El1 Digital, el abogado Rodrigo Tripolone confirmó que las personas que se encontraban alojadas en el lugar pudieron ser trasladadas.
El abogado que presentó el hábeas corpus para que se clausuren los calabozos de la comisaría de la localidad de Rafael Castillo, Rodrigo Tripolone, manifestó en diálogo exclusivo con este medio: “Las condiciones eran paupérrimas y es una situación que se repite en la mayoría de las comisarías bonaerenses”. Además, confirmó que los alojados en el lugar ya fueron trasladados a otras dependencias policiales.
“Cuando fui al lugar a visitar a mi cliente, pude observar que la humedad era tan terrible que no se podía respirar; había cables pelados por los cuales dos de los detenidos quedaron pegados y tuvieron que ayudarse entre ellos; había personas paradas esperando que las que estaban acostados en el piso se levantaran para poder descansar; el lugar se encontraba muy sucio y estaban completamente hacinados en esas condiciones”, detalló.
En la misma línea, el letrado también señaló que el espacio no contaba con ventilación y que los arreglos solían hacerlos, “como podían”, los mismos aprehendidos. Finalmente, la clausura fue llevada a cabo a raíz de un informe en que intervinieron diversos organismos, la asesoría pericial se presentó en el lugar y constató que al menos dos de las personas alojadas contaban con heridas infectadas que necesitaban atención médica especializada.
“Uno de los detenidos estuvo tres días esposado a una ventana en esas condiciones. Luego de la comprobación por parte de los profesionales de salud, se tomaron placas fotográficas de todas las instalaciones, se hizo un relevamiento socioambiental y se tomaron declaraciones ante el Juzgado en lo Correccional N° 2”, amplió Tripolone (@estudiotripolone).
Además, destacó que no se trata de una responsabilidad policial, dado que “son ajenos” y el problema es “estructural”. “La policía no está capacitada, ni preparada, ni equipada para mantener alojados detenidos, no le corresponde porque no es su función, su función es la seguridad”, agregó. Por último, reflexionó: “Son hechos cotidianos que ocurren en todas las comisarías. Se trata de personas que están aprehendidas porque están siendo investigadas: puede pasarle a cualquier ciudadano. Siguen siendo personas a las cuales en esos contextos se les quita la dignidad y pasan a sobrevivir en condiciones que los seres humanos no deberían atravesar, con mecanismos primarios de supervivencia».